Si has acabado la carrera de magisterio y te estás planteando opositar para convertirte en maestro en el ámbito público, es necesario que sepas cuál es la forma óptima de prepararse para conseguir tu objetivo. Y es que se trata de unas pruebas a las que se presentan muchas personas, todas con un mismo plan, por lo que hay que estudiar a conciencia.
De modo que, si tú también quieres ser opositor, o ya lo eres, es vital que prestes atención a todos los consejos que te traigo en este post.
Métodos para estudiar las Oposiciones
Puedes preparar las Oposiciones de Educación de muchas formas, lo importante, sin ninguna duda, es la constancia y la concentración. Puedes estudiar todos los días durante horas y horas, pero si no estás concentrado durante tus sesiones de estudio, es tiempo perdido.
Un consejo si vas a preparar las Oposiciones de Educación por tu cuenta, busca a otros opositores. Te ayudará a ganar en motivación y tendrás más fuerza de voluntad para sacrificar tu tiempo estudiando, teniendo un punto de apoyo cuando te surjan dudas.
Es complicado afrontar un reto tan importante sin la ayuda de nadie, hay quienes se encuentran listos para preparar el temario de forma independiente. Normalmente, suelen ser personas que saben muy bien de qué manera han de organizarse.
Si tomas la decisión de ir en solitario, es importantísimo que estés alerta sobre cualquier cambio o noticia que surja en torno al examen. Igualmente, entérate muy bien de los cursos homologados que puedes hacer para sumar puntos en la fase de méritos.
Consejos para tener éxito en las Oposiciones
1. Preparación. Prepárate en todos los sentidos, tanto mentalmente para el desafío que vas a emprender, como a la hora de organizar el temario y cuánto vas a progresar cada semana.
2. Inicio inteligente. Lo más lógico es empezar estudiando los temas en los que tengas un mayor conocimiento, manteniendo una motivación alta y seguridad en ti mismo desde el principio.
3. Clara organización del estudio. Ya que la fase de oposición consta de varias partes – explicar un tema, resolver un caso práctico, defender una programación didáctica y exponer la Unidad didáctica – has de preparar las pruebas de manera simultánea para no quedarte rezagado en ninguna.
4. Técnicas de estudio. Emplea recursos para memorizar y estudiar como el subrayado, los esquemas, las asociaciones de conceptos, juegos de palabras o incluso la Técnica Pomodoro. ¡Todo vale si te sirve!
5. Repaso constante. Es necesario repasar con frecuencia, ya que deberás estudiar un total de 25 temas.
6. Gestión del tiempo. Ensaya cada parte teniendo en cuenta el tiempo del que dispondrás en la prueba para no excederte del límite durante el examen.
7. Mantén el foco en tu objetivo final evitando distracciones innecesarias.
8. Originalidad a la hora de defender tu programación frente al tribunal, puede marcar la diferencia entre aprobar o no.
¡Y el resto ya depende de ti!